Vigésimo tercero paseo : Eternidades (1918 ) de Juan Ramón Jiménez
En : Prosa poética (2 vols ) ; Madrid : Espasa -Calpe , 2005


" ¡Intelijencia, dame
el nombre exacto de las cosas!
... Que mi palabra sea
la cosa misma
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas...
¡Intelijencia, dame
el nombre exacto, y tuyo
y suyo, y mío, de las cosas! "


Con estos versos tan conocidos y estudiados comienza el libro Eternidades de Juan Ramón Jiménez , un poeta que me gusta mucho releer y al que admiro profundamente por su carácter personal y su peculiar búsqueda de la belleza y lo absoluto . La crítica divide la trayectoria poética de Juan Ramón en tres etapas :
Sensitiva (1898-1915) , Intelectual (1916-1936) , y Última o verdadera , también llamada por el poeta "suficiente o verdadera " ( 1937-1958) . De 1918 , en Eternidades , es un famoso poema en que Juan Ramón Jiménez resume la evolución de su poesía haste ese año :

"Vino, primero, pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.
Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando sin saberlo.
Llegó a ser una reina,
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracundia de yel y sin sentido!
... Mas se fue desnudando.
Y yo le sonreía.
Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.
Y se quitó la túnica,
y apareció desnuda toda...
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre! "

En toda la trayectoria de Juan Ramón Jiménez encontramos títulos dignos de ser reseñados , pensemos , por ejemplo ,en Platero y yo (1914 ), de su época sensitiva ,verdadera delicia de prosa poética , donde el poeta expresa dolor, nostalgia , y pretende captar la sensibilidad ambiental , o en Arias tristes (1903 ) , poesía sencilla de formas , de mucha emoción . Recordemos Estío (1915 ) , donde hay una vuelta a la sencillez , o en Diario de un poeta recien casado (1916) , que supone una ruptura con su etapa modernista . Este libro es un claro ejemplo de lo que Juan Ramón llamó "poesía desnuda " , en la que se elimina lo anecdótico para dejar paso a la concentración conceptual y emotiva . La poesía se convierte en intemporal , en forma de conocimiento y símbolo y se identifica con la belleza , la eternidad y lo absoluto . A veces se convierte el poeta en objeto de descripción como vemos en este poema :


" Yo no soy yo.
Soy este
que va a mi lado sin yo verlo ;
que , a veces , voy a ver
y que , a veces, olvido.
El que calla , sereno , cuando hablo,
el que perdona, dulce , cuando odio,
el que pasea por donde no estoy ,
el que quedará en pie cuando yo muera . "


Posteriormente , la poesía pura de Juan Ramón no hace sino crecer en intensidad y profundidad ,lo vemos en libros como La estación total (1946) , deseo y anhelo de abolir el tiempo y de llegar a una posesión total de la belleza , de la realidad y del propio ser ,es decir , ansia de eternidad . En la etapa final ,cada vez el poeta se sumerge más en sí mismo , concentrado en su obra , cada vez más exigente y ambiciosa .Vemos libros como En el otro costado (1936-1942) , Dios deseado y deseante (1948-1949 ) publicados fragmentariamente en vida del poeta .
De todas las etapas de Juan Ramón Jiménez me gusta especialmente la segunda , la intelectual , la que habla de su evolución espiritual que le lleva a buscar la trascendencia . En su deseo de salvarse ante la muerte , se esfuerza por alcanzar la eternidad , sólo puede conseguirlo a través de la belleza y la depuración poética . Suprime , así , toda musicalidad , los argumentos poéticos y el recubrimiento ornamental , para adentrarse en lo profundo , en lo puro , en lo esencial . En esta etapa no apela al sentimiento , sino a la inteligencia . Su palabra quiere ser un instrumento para penetrar en la realidad , en busca de una nueva inteligencia . De esta manera , mediante la capacidad de hacer nombrar , el poeta se convertiría en un nuevo dios de una nueva creación .

" ¡Intelijencia, dame
el nombre exacto de las cosas!
... Que mi palabra sea
la cosa misma
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas...
¡Intelijencia, dame
el nombre exacto, y tuyo
y suyo, y mío, de las cosas!"



P.D . Recuérdese la peculiar ortografía de Juan Ramón : nunca usa la letra g cuando suena como j (elejía ); escribe s y no x , cuando ésta no es intervocálica ( éstasis ), y reduce ciertos grupos consonánticos (conciente ) . He respetado tales grafías en los textos que he reproducido .